Al 90% de las mujeres que conozco, yo incluida, una de las cosas que más nos gusta del mundo por la mañanas es el desayuno.
Es la comida de la que más disfrutamos. Damos total libertad a nuestro apetito, capricho y glotonería. Hay tantas clases de desayunos como de mujeres… Desde el soso y aburrido bol de cereales y leche, pasando por el continental, el americano, el andaluz, el exótico de piña y ¡¡el españolísimo chocolate con churros!! (¡¡ñam!!).
Muchas veces por falta de tiempo desayunamos a salto de mata… Pero un desayuno tranquilo, en un bar, con la prensa del día y si ya es mirando al mar en una terracita ¡¡es algo insuperable!!
Una mujer mal desayunada es una mujer malhumorada, sobre todo, ¡¡CUIDADO con las que somos cafeteras!!… Sin una dosis de cafeína es peligroso provocarnos.
Quiero hacer un llamamiento a todos los hombres: Si queréis conquistar a una mujer o a varias, informaos del desayuno preferido de vuestro objeto de deseo y por la mañana preparadlo con mantelito y todo en una mesita, para que se lo encuentre recién levantada… Si hacéis eso, me lo vais a agradecer toda vuestra vida… No cometáis el error de llevarlo a la cama con una bandeja, queda muy bien en las pelis, pero en la vida real no es práctico y es algo incómodo.
Preparando un buen desayuno a una mujer, le das lo primero que más la gusta en el mundo y luego se podrá hacer lo segundo…
Una de sentido común 
jajaja. Cuánta razón! A mi nunca me lo han llevado a la cama, el día que alguien lo haga me caso con él 🙂
Si es que no sé de dónde sale el tópico de que somos complicadas… 😛
Y cuanta razón tienes, no hay nada mejor que un buen desayuno, y cuando digo bueno no me refiero a lo que tomas, que eso va a gusto del consumidor, sino cómo y con quién…entonces lo segundo se puede convertir en lo primero.
Ui, pues a mi me gusta que me lo lleven a la cama, aunque sea incómodo y eso, pero despertarse y sin hacer nada tener el desayuno servido es una gozada!!!! buena recomendación!!